<p>Mientras, en Madrid, miles de personas conseguían parar el final de La Vuelta ciclista, en una manifestación que sitúa a España a la cabeza de las protestas contras Israel por el genocidio en gaza, a la cabeza en la defensa de los derechos humanos, mientras todavía había quien pensaba que permitir la participación de un equipo de Israel en la competición no iba a tener consecuencias. Mientras todo esto pasaba, Israel seguía masacrando gazatíes.</p>
